sábado, 31 de diciembre de 2011

FELIZ 2012


Bueno, en una ocasión me dijeron que una vez que cumpliera los treinta, los años iban a rodar rápidos. Sin darte cuenta casi.
Y así, se ha ido este 2011, sin darme apenas cuenta. Estoy harto de escuchar últimamente radio apocalipsis, pero por más que miro atrás, solo me han pasado cosas buenas.
He conocido muchos amigos, presumo de haber mantenido las amistades que ya tenía, sigo con la parsona más maravillosa que conozco, terminé un curso que me tenía de cabeza. Incluso he tenido un éxito literario sin precedentes gracias a mi Nocilla del alma.
Por eso, tengo motivos para pensar que el año que viene puede ser igual o mejor.
Así que voy a desearos con todas mis fuerzas que sea para Vds. pleno de felicidad. Muchisimas gracias por visitar mi blog y dejarme comentarios cargados de amistad y de buenos consejos que tanto agradezco.
Pues nada, feliz año, y que paseis una buena noche, no bebais demasiado (sobre todo si teneis que conducir) y no coged cosas del suelo.

sábado, 17 de diciembre de 2011

VALGAME CHANCLETO LO QUE ES LA MISERIA.





-¡Otra vez Tulipán!-Manifesté airado mientras mi madre nos preparaba una rebanada de pan. El desayuno, el bocadillo del colegio y encima la merienda con el mismo producto lácteo cadista bien valían una protesta.
Mientras tanto, Espinete, ajeno a nuestros asuntos aparecía de un rosa evidente en nuestro Telefunken en blanco y casi siempre negro. Y es que de los mecanismos de ese televisor se había averiado hasta la gitana, la cual, con un estoicismo digno de un maniquí, soportaba el acoso de tres “machitos” quieta en el transformador con sus bracitos hacia arriba, y casi siempre con las faldas sobre la cabeza. Nosotros habíamos probado empíricamente aquel dicho que refleja que una muñeca carece de vello púbico ya en nuestra tierna infancia.
-¡Estoy harto de tanto Tulipán! ¿Cuándo voy a comer Nocilla como los otros niños?- Protesté, a esa edad no entendía qué era un plan de austeridad. Tampoco mis primas eran peligrosas.
Mi madre se quedó parada un segundo. Ya había escuchado antes el mismo reproche, y suspiró apurada, inerme ante todo un niño. Pero no se inmutó, con una cuchara echó Cola-cao en la rebanada y dijo:
-¡Ea!, ahí tienes Nocilla.
-¡Que bueno, Nocilla! Exclamó mi hermano.
Tiene guasa la cosa. Encima de borrico, apaleado.

martes, 6 de diciembre de 2011

V


V

Crucé soñando el vacio que separa tu mundo y el mío
Sobre cuerdas me colgaba, cuerdas verdes, verdes varas
Unas firmes, otras sueltas, unas cortas, otras largas.

Imaginando que cambiamos de lugar tus mares y mis ríos
Mis valles por tus montañas
Mis calores por tus fríos.

A mí, vienes sonriendo y me abrazas
Bonitos besos, de azul, de adulto, de crio
Felicidad vestida de fresco
Tranquilidad disfrazada de brío.

Pero llega de nuevo la mañana
Y con sus luces se pierden mis desvaríos
Vuelvo a perder tu esencia, te vuelvo a perder amor mío.

Pero mañana volveré a buscare,
A cruzar soñando tu mundo y el mío